Crédito de la foto: WBCSD Events
En la cuenta atrás final para la Declaración de la COP26, el Consejo Internacional de Enfermeras (CIE) señala que la tormenta perfecta formada por el cambio climático, la COVID-19 y los sistemas de salud ya debilitados será una carga cada vez más pesada para las enfermeras y otros profesionales sanitarios agotados. El Director General del CIE Howard Catton ha declarado que, independientemente del acuerdo hoy, las exigencias en relación con el planeta, nuestros sistemas de salud y nuestras enfermeras cada vez van a ser mayores.
El CIE está instando a la incorporación de las enfermeras y otros trabajadores sanitarios en el centro de la formulación de políticas sobre el cambio climático subrayando que se trata de una cuestión de salud. Mientras se clausura la COP26 y los líderes miran hacia la COP27 del próximo año, el CIE señala que es más importante que nunca que se escuche la voz de los profesionales de la salud en el debate sobre el cambio climático puesto que si no cambia nada las enfermeras y los sistemas sanitarios sufrirán las consecuencias.
El Sr. Catton ha declarado "Las enfermeras están interviniendo en el debate sobre el cambio climático como nunca lo habían hecho antes porque están siendo testigos de su impacto en la salud. No estamos replanteando el cambio climático como una crisis de salud puesto que siempre ha sido una cuestión de salud y son las enfermeras y los profesionales sanitarios quienes han tenido que cuidar de las poblaciones y han analizado la causa, y la causa es el cambio climático. El cambio climático, la COVID-19 y las crecientes necesidades de salud como resultado del incremento de la población y su envejecimiento son una tormenta perfecta que amenaza con barrer nuestros sistemas sanitarios frágiles e infrafinanciados. Nuestras enfermeras están en el ojo de esta tormenta y comprenden mejor que nadie lo que hay que hacer en el recorrido hasta la COP27 del año que viene y, junto con los profesionales sanitarios, prometen ser más reivindicativas que nunca por la importancia de su contribución.
300 organizaciones, incluido el CIE, en representación de al menos 45 millones de enfermeras, médicos y profesionales de la salud en todo el mundo han firmado una carta abierta a los 197 líderes gubernamentales y las delegaciones nacionales en la COP26. En ella se avisa de que la crisis climática supone la mayor amenaza a la que se enfrenta la humanidad y se insta a los líderes del mundo a cumplir en materia de acción climática.
Muchos países se están perdiendo una gran oportunidad por no tener enfermeras participando en la toma de decisiones políticas sobre el cambio climático. Las enfermeras son los ojos y los oídos sobre el terreno - comprenden los problemas y conocen las soluciones - y la ciudadanía confía en ellas, así que si intentas formular políticas sobre el calentamiento global sin escuchar la voz de la enfermería estás volando a ciegas. Al clausurarse la COP26, los gobiernos han de comprometerse firmemente a contar con sus profesionales sanitarios en relación con el cambio climático y la salud por el bien de toda la humanidad.
No es solo que las enfermeras vean los efectos del cambio climático sino que el nuevo Código Deontológico del CIE contiene una sección sobre la salud global y hace referencia al papel de las enfermeras en la conservación y el mantenimiento del entorno natural. Por tanto, el cambio climático no solo afecta a las enfermeras en la práctica sino también a los principios sobre los que se sustenta la práctica de la enfermería".
El Sr. Catton ha realizado estos comentarios en una reunión en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP26 celebrada en Glasgow hablando con colegas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Alianza Global para el Clima y la Salud. El Sr. Catton y la Asesora Sénior del CIE sobre Políticas de Enfermería y Salud, Erica Burton, también han sido coanfitriones de un evento del programa del Pabellón de Salud de la OMS en la COP26, retransmitido en directo desde Glasgow y también virtualmente, con la Alianza de Enfermeras por Ambientes Saludables (ANHE) con la participación de enfermeras, profesionales de la salud y aquellos trabajan en la intersección entre el cambio climático y la salud.
La Sra. Burton ha declarado "Con los 27 millones que somos tenemos una voz fuerte e importante para defender la acción en materia de cambio climático. Las enfermeras son y pueden ser líderes poderosos para crear sistemas de salud resilientes al clima, así como para sensibilizar en el seno de la profesión de enfermería y las comunidades sobre las repercusiones del cambio climático en la salud y el bienestar, además de actuar para mitigar el cambio climático y sostener a las poblaciones y las comunidades en su adaptación.
Los profesionales sanitarios defendemos a los pacientes y la comunidad, así que podemos ser la voz de las poblaciones vulnerables al clima. Tal y como hacemos por ejemplo cuando estamos en la comunidad cuidando de los mayores, de los sintecho y de quienes padecen agotamiento por calor, golpes de calor y empeoramiento de la salud mental a causa de la mayor frecuencia e intensidad de las olas de calor que se están produciendo en países del Pacífico Occidental y en todo el mundo hasta el norte del globo.
Las enfermeras están siendo testigos y ya están respondiendo a los efectos del cambio climático en la salud y el bienestar, así como a la pandemia de COVID-19 y, junto con los profesionales sanitarios, serán llamadas a cuidar de las comunidades a medida que empeoran las condiciones sociosanitarias por las repercusiones del cambio climático. En estos tiempos, debemos ocupar un lugar central en las conversaciones para prevenir y responder a esta crisis".
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